Junio de 2016
EUSKAL HERRIA
Esta es la primera panorámica de mi hijo con tan solo 10 años. Bilbao desde el monte Artxanda.
Aquí os dejo las fotos de mi hijo. Esto es lo que él vio con su cámara. Son sus fotos. Yo, únicamente, las he editado y encuadrado para adecuarlas a la web.
Domingo 26 de junio
Los acantilados de Zumaia, en la zona del flych, es un lugar precioso y espectacular.
En los acantilados disfrutamos del mar por el norte y de la flora y la fauna del lugar por su zona sur. Era un prometedor comienzo... tan cerca de casa y tantas cosas por descubrir.
Flora, fauna... todo le llamaba la atención.
Cualquier cosa le llamaba la atención, flores, postes de balización de senderos, alambradas, insectos... de todo.
Nos cruzamos con este simpático australiano en los acantilados de Zumaia. Al final empatizó con el crío y, entre risas, intercambiaron algunas palabras en inglés. Después le di algo de información sobre la costa. Quería llegar hasta Donostia para pernoctar allí.
Tras esa anécdota, cada uno seguimos por nuestro camino, cada cual con su viaje, esperando encontrar nuevas vivencias, nuevas historias... Nosotros seguimos hacia Bizkaia... siguiente parada San Juan de Gaztelugatxe. |
San Juan de Gaztelugatxe, un lugar mítico en la costa vasca.
En la playa de Sopelana le llamó la atención esta pintura y... el atardecer.
Tras el paso por Gaztelugatxe, llegamos a Sopelana y tras jugar un rato y montar la tienda bajamos a la playa a ver "morir" el día. Después nos fuimos a descansar.
Lunes 27 de junio
El segundo día llegamos a Bilbao...
En Bilbao, los edificios y algunas estructuras le llamaron la atención.
El Guggenheim y sus alrededores.
El chico que se hacía llamar hilodepiedra y vendía sus collares junto al Guggenheim.
El funicular de Artxanda y dos vistas de la ciudad desde el mirador de la parte alta.
De las cuatro tomas de la izquierda resultó esta otra panorámica de mi hijo; el famoso perro "Popi".
Después de hacer su primera panorámica desde el monte Artxanda, al bajar de allí y antes de comer fuimos a jugar un poco al parque del Guggenheim. Allí, Iosu hizo esta panorámica del perro "Popi" con cuatro tomas. El montaje y la edición han sido, de momento, trabajo mío. Espero que pronto aprenda a editar sus propias fotografías.
Este es su trabajo en Salinas de Añana.
Con esta foto del dolmen de La Hechicera, terminaba el día.
Martes 28 de junio
Tras amanecer en Elciego, arrancamos camino de Las Bardenas Reales.
Los paisajes de Las Bardenas Reales llamaron la atención de mi hijo.
Dentro de Las Bardenas, nos topamos con una pequeña granja de ovejas.
Más paisajes "lunares" hasta finalizar en el Castildeterra.
El aita en plena faena.
Olite, con sus torres y cigüeñas, le gustó mucho. Allí jugó en el castillo con unos niños madrileños.
Viendo a su padre se le despertaron las ganas de la fotografía macro.
La iglesia fortaleza de Ujué le dio mucho juego.
Al atardecer llegamos a Santa María de Eunate.
Después de un intenso día, tras pasar por Puente la Reina, al llegar a Eunate ya no quería saber nada de fotografía. Necesitaba darle unas patadas al balón, correr y saltar como lo que en el fondo era... un niño. La fotografía la vive como un juego, pero poco a poco le va gustando cada vez más. Ahora era momento de descansar.
Miércoles 29 de junio
Comenzaba el cuarto día de viaje. De momento lo estábamos pasando fenomenal. Iosu disfrutaba y yo estaba feliz de verlo así. Íbamos a desayunar e intentar ver la iglesia del Cristo del Crucifijo. Pero antes le llamó algo la atención
Empezó el día haciendo algo parecido al macro...
Finalmente, después de desayunar, fuimos a ver la iglesia del Cristo del Crucifijo. El niño disfrutó mucho y sintió mucha curiosidad por esta imagen tan curiosa. Pasamos por Pamplona pero allí no sacó ni una sola fotografía. Se dedicó a disfrutar de la ciudad, sus calles, sus edificios. Las tiendas llenas de camisetas y artículos relacionados con los Sanfermines.
Luego... la Foz de Lumbier. |
Las escarpadas paredes de la Foz de Lumbier son refugio de aves como los buitres y las águilas.
El crío me dijo que él también quería "cazar" algún buitre y que si le podía dejar mi cámara con el Nikon 80-400 (pata negra) que había montado. Aunque un poco acongojado, no se le fuese a caer, accedí a dejársela si se apoyaba bien en algún punto. Finalmente, accedí, buscamos un punto de apoyo y pudo sacar algunas fotos. Abajo podéis ver los resultados.
Sus primeros "pinitos" con la fotografía de animales... lo cierto es que le dimos a todos los palos.
El Castillo de Javier.
Desde Javier en adelante ya no volvió a hacer más fotografías hasta llegar a Isaba que era el final de esta cuarta etapa. Pasamos por Leyre y se dedicó a jugar, saltar y observar todo su entorno. Era su momento de desconexión...
El precioso y tranquilo pueblo de Isaba.
Jueves 30 de junio
Comenzaba una jornada más. Nos dirigíamos a las montañas... entrábamos en los Pirineos.
Entrando por el valle de Belagua ascendimos a la Pier de Sant Martin.
El lago en la entrada a las Gorges de Kakuetta.
Paseando por el interior de la garganta.
Desde las gargantas de Kakuetta fuimos hasta Maule. Tras ver el Gaztelu-Zaharra y dar una pequeña vuelta por la ciudad pusimos rumbo a nuestra última parada nocturna, Donibane Garazi.
Viernes 1 de julio
En la preciosa y fortificada ciudad de Donibane Garazi-Saint Jean Pie de Port, pasamos una maravillosa mañana caminando por sus empedradas calles. Su perfectamente casco histórico te sumerge en un ambiente medieval y sus maravillosos paisajes son un paraíso para el fotógrafo.
Distintas imágenes de Donibane Garazi.
Acabamos el viaje visitando la ciudad de Baiona. Desde allí regresamos a casa. Había sido tan sólo una semana, pero vimos un montón de cosas y pasamos unos días estupendos. Siempre tendré un grato recuerdo de este precioso viaje.
© F. J. Preciado 2016